miércoles, 14 de febrero de 2018

Carta a mi yo malo

Hola Manolín, sí, yo sí puedo llamarte así, hay confianza.

No te enfades niño, acepta que no siempre podemos ganar.

No hay segunda ocasión para hacerlo bien. Aunque siempre está bien perdonar a tiempo y calmarse antes de lo que creas oportuno.

No te limites.

No seas como ellos (aunque ésto merece un tema a parte**).

No juzgues, ya que odias que el resto lo haga contigo.

No tengas prejuicios que vienen por estupideces creídas o aprendidas hace ya. Nos estamos dando cuenta que lo que creemos no siempre se corresponde con la realidad, y lo que aprendemos se puede desaprender o aprender algo mejor. Se puede sobreescribir. Podemos guardar la partida encima de los datos anteriores y no por éso dejamos de perder nada de lo que somos o creemos que.

No ladres sin morder, no es necesario. Aunque los dos sabemos hasta dónde, cómo y sin qué.

No guardes rencor, no tenemos tiempo para éso. El tiempo es puto oro.

El que dijo que mañana será otro día, era un gilipollas. "Del mañana no hay certeza científica".

Realmente creo que nos pensamos más maduros de lo que semos, y en realidad nos quedamos allí, atrapados, en brazos de mamá, cuando despedimos a papá. Pero realmente ahí es cuando aprendí a vivir sin corazón, lo que no significa es que tengamos uno ENORME. Si no, que si lo recubres de piedra, es más difícil penetrarlo. Aunque sabemos lo rojo que puede estar, y es dónde tenemos que llegar, no a ningún punto del planeta, no a ningún estatus, ni trabajo, ni mierdas en vinagre. Lo que necesitamos es que la patata y la perola vayan de la mano, te lo pongo en nuestro idioma para que lo pilles, pipa. ;). No te enfades porque te insulte, ni yo ni nadie suele hacerlo para ofender, y si lo hace pues les partimos la cara, pero al igual que tú dices si yo te ataco verbalmente, no me ataques físicamente, haz lo mismo. Sé más listo. Sé más rápido. Y SÍ, te estoy diciendo lo que puto tienes que hacer. Y NO, no soy tu madre. Ni quiero mi pin guardado, ni ninguna de nuestras salidas de niños repelentes, que tenemos unas cuantas, y lo sabes...

Así deberías de estar SIEMPRE, como estoy yo ahora, lleno de vida, de ganas, de posibilidades, de me como el puto mundo por las patas, a bocaitos, a trozacos, con salsa barbacoa o con mayonesa y palitos de cangrejo como esta noche, a lo Ferrán Adriá... XD. No hablemos de comer, que deberíamos de hacerlo menos, o hacerlo de manera más sana y menos compulsiva. No se va a acabar el mundo, aunque EL MOMENTO SEA AHORA, no hay que vivir al límite las 24h del día. EL JODIDO GRIS EXISTE, aunque no lo queramos ver.

Madrid mola, el que no molas eres tú juzgando todo el rato y poniéndole peros, lo que tienes que hacer es redescubrir las cosas y no crear ideas preconcebidas en tu cabeza con las cuales no llegas a ningún sitio más que a cabrearte sin sentido. Si algo no te gusta cámbialo, y si no, acéptalo, pero NO RAYES.

No seas una puta ameba.

Sal a la calle a que te de el SOL en el meño, cuanto menos pelo tenemos más atractiva es una calvita morena ;). Y si se nos caen los pelos, pues nos peinamos los 3 que nos queden, luego los 2, y luego el último, o nos rapamos la cabeza y nos reímos del resto como diría PapiAlex. Todo el mundo se queda calvo y no hace un drama, no vamos a ser menos. Aunque siempre nos quedará Turquía y ponernos una rata, pero ambos sabemos lo que cuesta ganar la pasta, que se consigue con tiempo... y el tiempo...

Si quieres cambiar algo, cambia tú.

Si no puedes cambiarlo, no pasa nada, todas las guerras no se pueden ganar o no podemos librarlas todas, acabaremos fatigados y sin ganas de seguir luchando.

La espada hay que aprender cuando sacarla y con quién.

Si no puedes perdonar, intenta olvidar.

Estás seguro, y si no, con dinero se puede arreglar, o tampoco tenemos gran cosa como para que vuelvan.

A veces sólo te entiendes tú, y ni éso. Habla claro, joder! La peña no se entera de lo que sientes porque no lo dices. Aunque no se diga gracias o por favor, no puedes omitir las palabras de las frases o las frases enteras. Tienes que hablar más con la gente que te quiere y a la que quieres.

Cuídala, y hazlo bien, no tienes otra, ni segunda oportunidad para reescribir la historia.

Crea grandes historias. De ti depende.

Ríete por todo, como solemos hacer, pero nunca ofendas, y si lo haces, pide perdón rápido, explica por qué lo haces y di la verdad, siempre es más fácil con la verdad.

Aunque no te pases de sincero, no todo el mundo está preparado para escuchar tu mierda.

No digas toda la verdad a no ser que sea totalmente necesario, a veces omitir un poco es mejor para la persona con la que hablas.

El único responsable de a dónde llegues eres tú. Tú guías tus pasos, tú decides lo que haces, tú tomas las decisiones y el resto del cuerpo te sigue.

Juega bien tus cartas. Si puedes guarda una en la manga, pero haciendo las trampas necesarias.

Cada día es una pequeña vida, la puedes cambiar si tú quieres, no hace falta esperar a mañana.

Deja de procrastinar, mongolo. Ya lo decía tu abuelo Simón: "no dejes para mañana lo que puedas hacer hoy". Lleva orgulloso tus orígenes por el mundo, pero siempre humildemente, hay que ser gallito, pero con los pies en la Tierra y sabiendo de dónde venimos, aunque no siempre dónde vamos.

A veces se necesita una hostia en la cara para despertar, y qué mejor que te la dé un hermano.

Siempre tienes que estar ahí para ellos, no hay excusas.

"No, yo sólo trabajaba aquí". Una polla, tú sabes que está mal, pero te haces el sueco por tu bienestar. La conciencia tranquila vale un Imperio. No se la vendas a nadie, por nada.

El camino del hombre recto, el cual nos gustaría llevar está a kilómetros luz de nuestra vida, intenta regirte un poco por él, pero no flipes, no eres perfecto, no eres un dios, no eres Odín, ni Ragnar, ni Floki... No puedes ser perfecto, evoluciona.

No eres un copo único en el universo. Somos especiales, sí, lo tenemos claro, pero no dejamos de ser humanos, como el resto, sentimos, comemos, bailamos, hablamos y nos diferenciamos todos, pero somos de la misma especie, no podemos ser tan diferentes a los demás. Sé humilde, repito.

O te pasas o no llegas. Del blanco al negro hay un cojón y eres capaz de pasar de un día a otro, y no va así la vaina, sé consecuente.

Todos los dichos de mierda [porque bien sabes que así los solemos considerar] tienen su parte de razón, por no decirte que aciertan todos al 100% y los mongolos somos nosotros por no hacerles caso a pies juntillas. Si un dicho se repite durante años, será por algo, antes de cerrarte en banda, piensa, evalúa y actúa si es necesario como dice o al contrario, pero sabiendo que son verdades como puños.

A lo mejor me estoy explayando demasiado y no nos gusta leer tanto, cosa que también deberíamos cambiar, porque como bien te cuento arriba los dichos y las palabras escritas que perduran con el paso del tiempo, siempre tienen qué enseñarnos. Aunque realmente no nos enseñan ellas, aprendemos nosotros, porque todo lo que queramos hacer, tiene que ser por nosotros. Por ti, por mí, y porque el Mundo es nuestro.

Hemos vivido una vida plena, llena de locuras y alegrías, también de fracasos y de tristezas, tú decides con qué te quedas. Así es como vivirás el tiempo que te queda. Yo me voy a dormir, si mañana te invade esa pena negra que tú y yo sabemos, no la dejes que gane, no tiene por qué hacerlo. Somos más fuertes, somos mejores, y nada ni nadie puede con nosotros.

NADA NI NADIE PUEDE CONMIGO CUANDO ESTOY ASÍ.

Siempre habrá días malos, pero se pueden transformar.

Repite alguno de tus mantras:

Estoy dos escalones por encima

Soy más grande que mis problemas

O lo que cojones quieras, pero ya que tienes la cabeza más dura que una jodida piedra de la subida desde Navarredonda-San Mamés que has hecho este finde con la Mersei, pues repite, repite, repite....

Piensa en cómo se siente ella.

Piensa en cómo se siente ella.

Piensa en cómo se siente ella.

Piensa en cómo se siente.

Piensa en cómo se siente.

Piensa en cómo se siente.

Piensa en cómo te sientes.

Piensa en cómo te sientes.

Piensa en cómo te sientes.

Piensa en cómo.

Piensa en cómo.

Piensa en cómo.

Piensa.

Piensa.

Piensa.

Piensa...


No hace falta ser el mejor, a veces el segundo aprende más que el primero...

No hace falta tener lo mejor, a veces con menos puedes ser más feliz.

Me tiraría toda la noche escribiéndote tron, pero te doy un penúltimo consejo...

Mira con perspectiva, aunque no tengamos certeza del mañana, hoy 14F, día de los enamorados... juijui, me mofo, quiero hacer cosas, y me gustaría que las hiciésemos juntos, y si no duermes lo suficiente, toma otro consejito, me parece que las vas a hacer tú solo y yo no voy a estar, te va a costar más, lo vas a hacer sin la sonrisa que tengo plantada ahora mismo en la cara... Yatusabee.

Sonríe pipa, que más adelante nos puede faltar un diente! Y si la tontería que nos decía ella no te vale, búscate otra, absorbe de los demás, pero no pierdas tu esencia, NUNCA.

Sonríe pipa, por lo que sea, porque has llegado al tren que se iba, porque tu llavero de la cámara de fotos se ha pulsado sin querer, porque has hecho algo rápido, porque las cosas te salen bien, por lo que te salga del pie, pero sonríe, es nuestro estado natural, tú eres un capullo que sale porque perdimos a nuestro papá muy rápido y te tuve que crear, si no, hubiera sido por otro motivo, pero te hubiera acabado creando, gracias a ti, soy más yo, pero no salgas tanto, porfa, que mi vida es taaaan bonita a veces que ni me la creo. Y tú eres el típico gilipollas que no se conforma con nada, y éso no mola nada. El eterno infeliz eres tú, no yo. Yo soy el feliz incansable, tal cual. No hay quién nos pare si queremos, un poquito tú, un muchito yo, que llevamos una racha al revés y te estoy cogiendo mucha manía, y lo peor es que me creo que soy yo, y me confundo. Somos los dos, pero yo molo más. :)

Te quiero, o me quiero. A ver si nos lo decimos más a nosotros, que al resto sí que se lo solemos decir, pero para quererles bien... Sabes lo que tenemos que hacer. <3 .

Me despido capullín, a ver si tardo en saber de ti. 

Un abrazo.

M.

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